VILLANCICO DEL TURRÓN
No podía faltar una historia que diera protagonismo a este dulce navideño tan popular. De origen probablemente árabe, esta delicia gastronómica tiene su origen en antiguas recetas a base de productos mediterráneos muy usados en la pastelería: miel y frutos secos (almendras, avellanas, nueces...). Su textura, dura y compacta, le distingue de otras preparaciones. El camino desde la masa, viscosa pero cremosa a un tiempo, hasta su solidificación y su conclusión tan sólida como un ladrillo da pie a este villancico culinario.
Es esta una historia llena de imaginación y ternura; la divertida y dulce aventura de una pastora que, con todo su cariño, decide ofrecerle al niño Jesús algo único: un pastel. Pero, como en toda buena historia, las cosas no salen exactamente como lo esperaba... ¿Quién no se ha encontrado alguna vez han intentado hacer un regalo perfecto y ha terminado enfrentando un desastre? Pues eso le pasa a nuestra querida pastelera, que, tras un largo camino al portal, descubre que su receta ha tomado una forma un tanto... ¡inesperada!
Con el aire de una balada folklórica y un "la, ra, rá; la, ra, rá..." que le confiere un ritmo y fluidez pegajosa se va contando esta historia alternando la narración con jocosos comentarios que apostillan con socarronería cada escena del relato. Encantador, ya lo veréis.
Compartamos y disfrutemos de esta historia llena de humor, ternura y creatividad, que además nos revela el origen de uno de los dulces navideños más representativos: ¡el turrón! Sin más preámbulos, os dejo con este encantador villancico, titulado 'La Pastora Turronera'.
En general, es un villancico entrañable y muy divertido, perfecto para compartir en un ambiente familiar. Combinado el humor con la ternura y la tradición navideña, crea algo ligero pero significativo.
¡Espero que disfrutéis escuchándolo tanto como yo cuando al componerlo!
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